Movilidad como servicio: integrada y bajo demanda

Trenes, tranvías, vehículos privados y sistemas de metro han definido la vida urbana y han conectado a nuestras ciudades durante el siglo pasado. Más recientemente, proveedores de servicios de transporte tales como Uber, Cabify y Lyft, entre otros, así como sistemas de intercambio entre usuarios de bicicletas, automóviles y patinetes han interrumpido el sector del transporte y han brindado a ciudadanos alrededor del mundo nuevos esquemas de movilidad.

A medida que la variedad de opciones de movilidad urbana sigue evolucionando, también se transforma la forma en la que accedemos y conectamos estos múltiples sistemas. Hoy en día, los modos de transporte generalmente operan de manera independiente, pero esto podría cambiar radicalmente con el desarrollo de la Movilidad como Servicio (MaaS por sus siglas en inglés). Este concepto es una alternativa al modelo de transporte basado en la oferta que ha imperado en el pasado, poniendo a la demanda de viajes como el centro de una amplia gama de soluciones de movilidad que tienen la posibilidad de integrarse entre ellas. Como opera desde una plataforma unificada, las ventajas que ofrece MaaS son múltiples, pues los ciudadanos tienen la opción de mezclar y combinar opciones de transporte masivo con servicios nuevos y bajo demanda. La Movilidad como Servicio tiene el potencial de integrar trenes, autobuses, taxis y bicicletas compartidas, coches compartidos, entre otros, y hacer que el transporte multimodal sea fluido, eficiente y cómodo.

Movilidad integrada basada en datos abiertos

La Movilidad como Servicio ha surgido, en parte, debido a la inmensa producción de datos (big data) generada por dispositivos y plataformas móviles y conectadas, que se prevé que para el año 2020 recopilen 2,3 zettabytes de datos cada año. La movilidad urbana, la cual antes dependía mucho de la infraestructura, ahora se basaría en gran medida en la información. La recopilación de datos ha creado una gran cantidad de conocimiento que facilita el vínculo entre un usuario y sus preferencias de movilidad en una ciudad. Por otro lado, también implica el acceso a información en tiempo real que mide la ubicación y la frecuencia de los sistemas de transporte masivo. Al utilizar un sistema de movilidad basado en datos, los ciudadanos pueden monitorear y sincronizar diferentes opciones y optimizar sus desplazamientos diarios, ahorrando una considerable cantidad de tiempo. Se prevé que para 2023, el uso de las plataformas de podrá ahorrar a sus usuarios 90 horas al año.

Movilidad urbana, flexible y accesible

Además de la integración de diferentes medios de transporte, otro aspecto clave en el concepto Movilidad como Servicio es la unificación de transacciones e información, como el pago y la información del usuario, bajo una única interfaz. La simplificación de estos procesos permite que la movilidad sea más fácil de usar y flexible para responder a las necesidades de movilidad de cada ciudadano y ciudadana. Por ejemplo, la aplicación móvil Whim, lanzada en Finlandia por la empresa MaaS Global, ofrece tres planes de pago diferentes que van desde el pago por viaje hasta el acceso ilimitado al alquiler de coches, taxi, el transporte público local, el sistema de bicicleta de la ciudad, como también el acceso sistemas de coche compartido.

Además de la flexibilidad, Whim ofrece precios competitivos que están por debajo del gasto mensual que implica tener un coche en Helsinki. La movilidad integrada, flexible y accesible podría revolucionar la forma en que nos movemos a diario; asimismo, se espera que la Movilidad como Servicio tenga un profundo impacto en la propiedad de coches privados en todo el mundo, ya que los usuarios podrían inclinarse a mezclar y combinar opciones en lugar de arriesgarse a quedar inmovilizados en el tráfico vehicular o pasar tiempo buscando plazas de parking disponible.

La implementación de la Movilidad como Servicio

Un informe revelador de Juniper Research indica que la implementación de Movilidad como Servicio reemplazará para el 2023 a 2,3 mil millones de viajes en autos privados urbanos anualmente. A medida que la implementación de las plataformas de Movilidad como Servicio aumenta en todo el mundo, se espera que el sector valga más de un billón de euros para el 2030, lo cual significa una gran oportunidad para el sector privado. Grandes compañías de la industria automotriz como BMW y Toyota se encuentran actualmente invirtiendo en investigación y desarrollo de plataformas de movilidad como servicio. Mientras que, para el sector público, la Movilidad como Servicio podría representar parte de la solución para reducir la congestión vehicular y hacer que el transporte público sea más eficiente y sostenible.

Para implementar con éxito el Movilidad como Servicio en las ciudades, la buena gobernanza es esencial. De hecho, debido a la coordinación entre los actores interesados del sector público y privado que se encuentra en la ciudad, Helsinki fue clasificada como la ciudad número 1 en el mundo en cuanto su estado de preparación para la implementación de Movilidad como Servicio a gran escala. Por otro lado, se prevé que la implementación de Movilidad como Servicio será más lenta en los EE. UU. debido a la “fragmentación” entre los diferentes niveles de gobierno regionales y federales.

El desarrollo de la Movilidad como Servicio tiene el potencial de transformar la movilidad urbana haciéndola más eficiente y generando un ahorro de tiempo y dinero si ésta consigue consolidarse a través de la acción coordinada de múltiples actores. Con este propósito, durante SUM Bilbao 19 se fomentará el diálogo y el debate entre representantes del sector público y privado, y se discutirá las oportunidades y los desafíos relacionados con el futuro de MaaS en las cuidades.